El nuevo Departamento de Eficiencia Gubernamental (D.O.G.E.), liderado por Elon Musk, no ha perdido tiempo y a recortar el gasto federal. En sus primeras 80 horas, ya ha cancelado contratos y arrendamientos por un valor total de 420 millones de dólares.**
Un comienzo que ha suscitado gran atención, pero que también plantea dudas sobre la capacidad de la agencia para alcanzar los ambiciosos objetivos de reducción de costes establecidos por el magnate de Tesla.
Primeros recortes al gasto federal por valor de 420 millones de dólares
El primer paso de Musk y su equipo se ha centrado en contratos de alquiler de oficinas y arrendamientos relacionados con espacios de oficinas, muchos de los cuales estaban en gran parte vacíos.
En particular, parte de los contratos estaban relacionados con iniciativas de diversidad, equidad e inclusión (DEI), es decir, programas centrados en la inclusión y los derechos en el lugar de trabajo, que Musk ha criticado repetidamente como un despilfarro de recursos públicos.
Las primeras acciones reflejan la determinación de Musk de remodelar las actividades federales. Pero con un gasto federal que supera los 6 billones de dólares al año, un recorte de 420 millones de dólares sigue siendo modesto.
A este ritmo, los recortes anuales ascenderían a unos 67.000 millones de dólares, una cifra que representa sólo una pequeña parte del objetivo inicial de Musk de reducir el gasto federal en 2 billones de dólares. Incluso un objetivo revisado de 1 billón de dólares requeriría un mayor esfuerzo.
Los analistas siguen de cerca la evolución para ver si el departamento consigue mantener o incluso aumentar los recortes hasta los dos billones de dólares.
La elección de la cifra de 420 millones de dólares también ha suscitado mucha curiosidad. En 2018, Musk propuso sacar a Tesla de la bolsa a 420 dólares por acción. Algunos creen que Musk podría haber elegido esta cifra intencionadamente, para llamar la atención.
¿Eficiencia o recortes políticos? Las primeras acciones del D.O.G.E. dividen la opinión pública
En su primer día de mandato, Donald Trump firmó una serie de órdenes ejecutivas, entre ellas una que rebautizó el Servicio Digital de Estados Unidos (USDS) como DOGE de Estados Unidos. Además, el DOGE, inicialmente concebido como un organismo externo, se integró oficialmente en la administración federal gracias a esta orden ejecutiva, convirtiéndose así en una parte oficial del gobierno estadounidense.
Anteriormente, el Servicio Digital de Estados Unidos (USDS) operaba como una entidad relativamente independiente, centrada principalmente en la modernización de la tecnología y los servicios digitales para las agencias gubernamentales. Su objetivo era simplificar los procesos digitales y mejorar la eficiencia de los servicios públicos, resolviendo problemas técnicos y diseñando soluciones innovadoras para los proyectos gubernamentales.
Con el cambio de nombre a DOGE de Estados Unidos y su incorporación al gobierno federal, el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) adquiere ahora un alcance más amplio. El DOGE ya no se limita a la gestión de las tecnologías digitales, sino que también se centra en un objetivo más amplio de eficiencia administrativa y reducción del gasto público.
Aunque los recortes iniciales son coherentes con el objetivo de Musk de eliminar las ineficiencias, algunos analistas consideran que centrarse en los contratos más pequeños y en los arrendamientos no utilizados podría no resolver los problemas más importantes del gasto federal. El D.O.G.E. tendrá que ocuparse de categorías de gasto más importantes, como la defensa, la sanidad y los programas de previsión social.
El éxito de estos esfuerzos dependerá de la capacidad de Musk para superar las resistencias políticas y obtener el apoyo bipartidista para recortes más profundos.
Las reacciones a los primeros recortes del D.O.G.E. han sido decididamente contradictorias.
Por un lado, los partidarios elogian la rapidez de las acciones como un paso necesario para reducir el déficit presupuestario anual del gobierno estadounidense. Por otro lado, sin embargo, hay muchas dudas. Los opositores se preguntan si estas medidas lograrán realmente producir resultados concretos o si son sólo gestos simbólicos.
Además, los críticos de Musk plantean preocupaciones sobre la transparencia del proceso de toma de decisiones, temiendo que los recortes puedan estar motivados por razones políticas, más que por una necesidad real de ahorro.
El D.O.G.E. apuesta por el blockchain
Mientras tanto, según informa () Bloomberg, Musk está valorando utilizar la tecnología blockchain dentro del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), para controlar el gasto federal, proteger los datos sensibles, facilitar los pagos e incluso gestionar las instalaciones gubernamentales.
El interés por el sector de las criptomonedas también ha aumentado gracias a la adopción del logotipo de Dogecoin por parte del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE). El sitio web oficial del nuevo departamento, doge.gov, ha elegido el logotipo de Dogecoin, símbolo de la moneda meme.
El interés de Musk por Dogecoin ha generado a menudo aumentos de precio, y el aumento de la atención hacia la moneda meme podría tener un efecto dominó también en otros proyectos.
Un proyecto que está suscitando gran interés es Meme Index (//ktsl888.com/visit/memeindex-it), que ofrece cuatro cestas de monedas meme, cada una con características y niveles de volatilidad diferentes, pensadas para adaptarse a distintos perfiles de riesgo.
En el Titan Index, encontramos la moneda meme Dogecoin (DOGE), pero también Shiba Inu (SHIB) y Pepe Coin (PEPE). Esta cesta está pensada para quienes buscan una mayor estabilidad. Los otros índices, en cambio, presentan un mayor riesgo.
El Moonshot Index incluye monedas meme con una sólida base de seguidores, pero que aún no han alcanzado una capitalización de mercado de 1.000 millones de dólares. Mientras que el Midcap Index selecciona monedas meme con una capitalización entre 50 y 250 millones de dólares, que ofrecen un buen potencial de crecimiento, pero con una mayor volatilidad.
Por último, el Frenzy Index está pensado para los inversores más audaces, con monedas meme de alto riesgo y alto potencial de rendimiento.
Los titulares del token nativo $MEMEX pueden elegir a qué cesta acceder, participar en el gobierno votando sobre qué monedas meme incluir en los distintos índices y poner en staking sus tokens para generar un rendimiento pasivo.
El proyecto aún está en fase de preventa y está teniendo un notable éxito. Hasta ahora ha recaudado más de 3 millones de dólares.
Conclusión
Recordemos que el mercado de criptomonedas es altamente volátil, por lo que es fundamental hacer siempre nuestras propias investigaciones. Este artículo tiene un propósito puramente informativo y no debe considerarse un consejo financiero.